La actividad de la revisoría fiscal bajo la concepción moderna es servir de asesoría a la alta dirección de las empresas para que, a partir de la planeación de sus labores, se pueda asegurar que todas las operaciones celebradas durante el ciclo operativo cumplen con las cualidades necesarias para garantizar la transparencia y veracidad de los estados financieros, implementando las herramientas que le permitan a la gerencia un eficaz control del negocio, asegurar que los procesos administrativos, operativos, contables y financieros, se realicen bajo los parámetros legales, generando seguridad en las decisiones de la junta y sus administradores, contribuyendo de esta manera a optimizar la gestión gerencial.
Como resultado de su trabajo le debe ofrecer a la gerencia y a los socios tranquilidad respecto de que los bienes de la sociedad están debidamente salvaguardados y que las decisiones por ellos adoptadas han sido aplicadas en las actividades del negocio.
